EL MITO ORIGINAL DE LA CREACION

Durante muchos siglos se nos enseñó la mentira de la creación de Adán y Eva, realizando un verdadero lavado de cerebro en la raza humana para crear una cultura de obediencia ciega, sometimiento de las mujeres y...tantas cosas más. Nuestros más antiguos antepasados supieron, en lo más profundo de su ser, que la Fuente Creadora es la Diosa. Doncella, Madre y Anciana, la triple Diosa renace en nuestra conciencia después de un silencio impuesto a sangre y fuego durante 7.000 años. Hace más de una década, con el descubrimiento del genoma humano una cientifica estadounidense descubrió que la totalidad de la información necesaria para la vida se encuentra en el par de cromosomas XX, que denota a la hembra. Este par transmite a su descendencia de ambos sexos una proteína, el ADN mitocondrial, sin la cual la célula no puede vivir.

El par de cromosomas XY, que denota al macho, deviene así de una mutación del XX, por lo cual sólo contiene la información necesaria para experimentarse como ser masculino en esta vida.

Ahora les contaré un mito de creación muy anterior al de los libros religiosos conocidos.
" A solas, impresionante en su belleza, completa en sí misma, la Diosa cuyo nombre es imposible de pronunciar flotaba en el abismo de la Gran Oscuridad, antes de que todas las cosas fueran. Y mientras miraba el espejo curvo del oscuro Universo, vió el radiante reflejo de su propia Luz y se enamoró. Por el poder que habitaba en Ella, hizo el Amor con su propio reflejo y lo llamó Miria, la Maravillosa. De este éxtasis brotó la canción singular que habita en todo lo que es, ha sido o será alguna vez. Y con la canción llegó el Movimiento del que nacieron los círculos y las esferas de los mundos. La Diosa se llenó de Amor y dió a luz a una miríada de espíritus brillantes que llenaron los mundos y dieron origen a todos los seres. Y en aquel grandioso momento Miria, impulsada hacia afuera, se fue haciendo cada vez más masculina a medida que se alejaba de la Diosa. Así se convirtió en el sonriente Dios compañero. Desde entonces, el deseo lo vuelve a atraer hacia la Diosa alrededor de la cual gira eternamente, buscando reunirse con Ella a través del Amor. Todo comenzó con el Amor, todo busca retornar al Amor. El Amor es la ley, la maestría, la sabiduría y el gran revelador de los Misterios".