Nuevamente la Rueda del Año nos lleva a la Muerte y la Regeneración en el solsticio de Invierno. Uno de los 8 sabbats que festejamos en el neopaganismo. La mayor oscuridad (la noche más larga del año) nos conecta con nuestro interior, con el reposo y la capacidad de recapitular y meditar. Sabemos o presentimos qué es lo que tenemos que dejar morir para darle lugar a lo nuevo.Y no solo con respecto a nosotr@s mismas sino a nuestra relación con la Madre Tierra, con l@s demás y con todos los seres vivos. Simboliza el útero de la Diosa. Luego del solsticio, la luz vuelve a crecer, poquito cada día.
Es el renacimiento de la luz solar (la Niña Solar/ el Niño Solar) por eso en el ritual luego de "dejar morir" construiremos frases o dibujos o formas con masa sobre aquello a lo que necesitamos renacer.
Necesitamos ser más respetuos@s de la diversidad. Es un buen tema para trabajar en este solsticio. Hermanad@s en las diferencias. Salud y bendiciones!
